Blog para el master en Liderazgo Político y Dirección Pública de instituciones Político-Administrativas

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jueves, 20 de diciembre de 2012

DESOBEDIENCIA CIVIL Y ORDENAMIENTO JURÍDICO.


Esta entrada es una reflexión motivada al hilo del elevado número de reformas legislativas y administrativas acometidas en el marco del Estado Español, en los últimos cinco años y de los movimientos sociales de resistencia que se han ido creando.

En primer lugar, conviene aclarar el significado del término desobediencia civil. Tres autores destacan por sus estudios acerca de la desobediencia civil, Norberto Bobbio, Jürgen Habermas y Hannah Arendt. Otras personalidades también han escrito sobre esta cuestión, tales como, Thoreau, Rawls, Dworkin, M. Luther King, Tolstoi, Ganghi o Einstein.

Estos autores coinciden en que la desobediencia civil presenta una serie características: carácter público, no violento y aceptación voluntaria de la sanción. La desobediencia civil es “un acto que, motivado por convicciones de conciencia o principios de justicia, implica el incumplimiento de un mandato del soberano por parte del agente (carácter desobediente), así como la aceptación responsable de las consecuencias de dicho acto (carácter civil)”[1], cuyo objetivo es mejorar un aspecto del ordenamiento jurídico cumpliendo con la figura de buen ciudadano. Sin embargo, esto no significa que cualquier acto que desobedezca o desafíe la ley suponga un acto de desobediencia civil. Los actos criminales, conspiraciones, golpes de Estado, terrorismo o revoluciones son actos de desobediencia a la ley, pero diferentes a un acto de desobediencia civil, y también diferentes entre sí.

Según Habermas, “todo Estado democrático de derecho que está seguro de sí mismo, considera que la desobediencia civil es una parte componente normal de su cultura política, precisamente porque es necesaria[2]. En España se han acometido recientemente una serie de reformas en el ámbito del sector judicial que agudizan la crisis del Estado de Derecho. Una parte de la reforma del Código Penal[3] apunta a la criminalización de la protesta social, además se dificulta la legítima defensa por la imposición de tasas judiciales (considerablemente elevadas para la situación económica de la mayoría social). Y ya es un hecho que se ha comenzado a expedir sanciones y se han ejecutado detenciones a protestantes pacíficos, en mi opinión, con el objetivo de alentar el temor a la movilización social.

Desde el ministerio de Justicia no se concibe el ordenamiento jurídico como un proceso histórico. Sus reformas van dirigidas a blindar el ordenamiento jurídico basado en la situación de 1978. Por ello, cabría plantearnos por parte de quienes creemos que el ordenamiento jurídico está obsoleto ¿debemos seguir ejerciendo la desobediencia civil sobre algún aspecto concreto o nos rebelamos contra el conjunto del ordenamiento jurídico vigente?

En mi opinión, debemos aunar las diferentes luchas parciales, a través de la desobediencia civil. Con el objetivo de formar un contra-poder, donde confluyan esas diferentes luchas, que se rebele y opte por un nuevo orden constituyente.





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HABERMAS, J. (2000). La desobediencia civil. Piedra de toque del Estado democrático de Derecho y Derecho y violencia. Un trauma alemán. En J. Habermas, Ensayos políticos. Barcelona: Península.
FERNÁNDEZ BUEY, F. (2004). Guía para un Globalización alternativa. Barcelona: Ediciones B.
ESTEVEZ, José A. (1994). La Constitución como proceso y la desobediencia civil. Madrid, Trotta.



[1] FERNÁNDEZ BUEY, Fco (2004). Guía para un Globalización alternativa. p.241
[2] HABERMAS, J. (2000). La desobediencia civil. Piedra de toque del Estado democrático de Derecho y Derecho y violencia. Un trauma alemán. p. 54.
[3] Texto del anteproyecto de ley orgánica por la que se modifica la ley orgánica 10/1995, de 23 de noviembre, del Código Penal. http://www.ub.edu/dpenal/CP_REFORMA_17_7_12.pdf

martes, 11 de diciembre de 2012

LA CORRUPCIÓN EN ESPAÑA

Esta entrada viene motivada por ser contenido de la asignatura Ética Pública, Buen Gobierno y Transparencia y por ser un tema de actualidad política.

Esta reflexión se ha dividido en dos tareas la lectura del estudio 2863, realizado por el CIS, La corrupción política en España[1] y posteriormente una interpretación de las causas de la corrupción política en base a esas entrevistas y algunas posibles soluciones.

En las entrevistas se denota que la corrupción no es una práctica únicamente identificada en el ámbito político, también se señala en el ámbito jurídico y económico.

La percepción de la corrupción en España tiene como causas:
  • La falta de capacidad de control por parte de la ciudadanía de sus representantes políticos y sobre los demás actores sociales. 
  • Aceptación de la corrupción por parte de la sociedad como una práctica normalizada. 
  • La verticalidad de la responsabilidad. 
  • El fraude fiscal y la economía sumergida. 
  • La pérdida de valores culturales y principios morales. 
  • La falta de formación de los cargos políticos. 
  • La falta de limitación de los mandatos. 
  • La falta de autocrítica. 
  • El incumplimiento del programa electoral. 
  • La falta de cercanía a la ciudadanía. 
  • La falta de rendición de cuentas. 
  • La utilización del servicio público en beneficio propio o personal. 
  • La utilización del cargo público para auto-promocionarse en el sector privado. 
  • El clientelismo político-económico. 
  • La falta de mecanismos eficientes para evitar las prácticas corruptas. 
Las consecuencias de la extensión de estas malas prácticas ha supuesto el aumento de la percepción de la corrupción, sobretodo en el ámbito político. Esto ha supuesto una deslegitimación de los gobiernos y los partidos políticos, y de la política en general, siendo la prueba más evidente el aumento de la tendencia abstencionista en las últimas elecciones.

Llegados a este punto cabe hacerse la pregunta ¿existen soluciones a la corrupción? Desde mi punto de vista, la participación política es la que puede ofrecer soluciones a la corrupción de cargos políticos y de la sociedad en general. A continuación, referiré algunas de las posibles soluciones que podrían solventar los problemas anteriormente mencionados en España.

Estas soluciones podrían encuadrarse en dos grandes bloques, uno referente a la introducción de medidas de participación democrática y otro referente a la adopción de medidas anticorrupción. Todo ello permitiría vertebrar a la sociedad de tal manera que la población pudiera tener mayor capacidad de control sobre las decisiones políticas.

En cuanto al bloque del aumento de la participación democrática podrían tomarse medidas como:
  • Reforma de la regulación sobre Iniciativas Legislativas Populares, para que se permita no solo la proposición de elaboración de leyes mediante este mecanismo, sino también la reforma o la cancelación. Asimismo, la participación en el debate legislativo por parte de los ciudadanos ponentes debe ser obligatoria. También la eliminación de restricciones sobre los temas. 
  • Realización de consultas populares, a cualquier nivel administrativo, sobre temas transcendentales o a petición de la ciudadanía. 
  • Introducción de mecanismos de participación en la contrata y gestión de servicios públicos. 
  • Participación en la elaboración y gestión de los presupuestos de administraciones públicas. 
  • Introducción de la rendición de cuentas en las instituciones político-administrativas. 
  • Desarrollo del voto electrónico para facilitar la participación popular. 
En cuanto al bloque de medidas contra la corrupción se podría llevar a cabo:
  • La aprobación de una ley integral y severa contra la corrupción política. 
  • El control estricto del absentismo de los cargos políticos 
  • La creación de sanciones por dejación de funciones. 
  • La limitación de salarios. 
  • La limitación de mandatos en un mismo puesto. 
  • La eliminación de la inmunidad asociada al cargo en lo relativo a los delitos de corrupción. 
  • La adopción de imprescriptibilidad de los delitos por corrupción. 
  • La reducción de los cargos de libre designación. 
  • La regulación de la incompatibilidad por cargo público y participación en empresas privadas. 
  • Medidas estrictas contra el transfuguismo. 
  • La revocabilidad de los cargos públicos. 
Para que estas medidas fuesen efectivas deberían acompañarse de un aumento de la financiación en las administraciones, sobre todo las que luchan contra la corrupción, el fraude fiscal y la economía sumergida y las de ámbito local. Se trata de adecuar la financiación de las administraciones públicas a los servicios y funciones que debe cumplir.






miércoles, 5 de diciembre de 2012

Con motivo de González y Aznar.



Esta entrada corresponde a una breve reflexión acerca de las recientes apariciones públicas de los dos ex-presidentes de España Aznar y González. La reflexión se ha basado en dos crónicas que pueden encontrar al final de la entrada.

Sospecho que la coincidencia de estas dos entrevistas ha sido motivada por la caída del bipartidismo en las últimas elecciones y encuestas electorales. Así como los últimos contactos mantenidos por PP y PSOE, por ejemplo en el tema de los desahucios dejando de lado a todos los demás grupos políticos y a los colectivos sociales interesados en el tema.

Se pueden resaltar de las entrevistas dos ideas base. Una sería la idea de centralidad como neutralidad política y la otra la crisis de la política.

En cuanto a la primera idea, supongo que al hablar de espacio central hacen referencia únicamente al espacio electoral. Lo cual refleja que PP y PSOE  solo conciben la democracia como algo formal, y además desde los partidos. En mi opinión, la partitocracia no es suficiente para conseguir una democracia plena. La elección de representantes no es suficiente para que podamos hablar de una democracia, para eso se necesita conseguir involucrar al demos en mayor medida en la participación de la vida pública.

Otro tema que me llama la atención es la idea de neutralidad política. ¿Qué significa ese concepto? Supongo que el concepto de neutralidad intenta romper con el esquema maniqueo izquierda-derecha ¿pero lo hace realmente? ¿Se puede ser neutro ideológicamente? ¿Pensar no supone ya una toma de posición ideológica? Son dudas que me surgen cuando escucho grupos políticos hablar de este tema y la última que me surge es ¿qué motiva el discurso de la neutralidad política? En mi opinión, la desideologización es uno de los argumentos que se utilizan para instaurar dictaduras.

En cuanto a la crisis de la política, creo que en las dos entrevistas se refleja muy bien algunas de las causas de la misma. Precisamente los dos partidos apuntan hacia reformas de sus aparatos internos incidiendo en potenciar esas mismas causas. A una sociedad que está pidiendo poder participar más en la vida pública, les responden con una búsqueda de nuevos dirigentes que lideren la salida de la crisis. A la falta de auto-crítica contestan que han sido otros los que han roto el pacto social de la Transición. A la falta de soluciones concretas responden con discursos ambiguos y vacíos.

Para finalizar esta reflexión, creo conveniente hablar de la situación actual de los dos partidos. Pienso que los dos están siendo fieles a sus ideales, que acaban por asemejarse mucho, aunque partían históricamente de distintas posiciones filosóficas.

La crisis por la que pase el PP, viene motivada por la crisis en general de la política y el cuestionamiento a los partidos, no sufre una crisis de falta de valores o una desideologización. Por ello, habla de “necesidad imperiosa de fortalecer y dignificar nuestras instituciones, algo que las fuerzas o corrientes filosóficas que conforman este partido llevan haciendo desde sus orígenes con las instituciones -no solo administrativas- capitalistas.

Respecto a la crisis del PSOE, tiene una doble vertiene una exógena, por la crisis de la política en general y otra endógena, por la crisis de valores que está sufriendo en esta coyuntura, la cual queda muy bien reflejada en el devenir histórico de la socialdemocracia. Hemos de insistir que la crisis del PSOE es mucho más profunda, pues lo que está en cuestión es su base filosófica. El mejor reflejo en la entrevista son las siguientes afirmaciones de Rubalcaba: con esa misma “vocación de mayoría”, lo que él pretende es más bien abanderar un “radicalismo reformista”, sin embargo luego se puede leer el PSOE es hoy “totalmente anticapitalista”. Si se reforma algo es para dejarlo en mejor estado, pero entonces no se refleja esa contrariedad al objeto de la reforma. Pienso que el problema del PSOE es que comparten una línea filosófica que les conduce a un objetivo distinto (reforma capitalismo) al que dicen pretender conseguir (socialismo), dado que contemplan únicamente el movimiento objetivo de la realidad. De ahí proviene el cambio histórico de posturas ideológicas y su crisis de valores, como bien refleja la siguiente afirmación de González "Me decían que estaba haciendo la política económica de Thatcher. Pero era imprescindible



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Crónica de González
Entrevista a Aznar